¡Nunca lo compares! Nuestros hijos son todos diferentes y cada uno tiene sus defectos y sus virtudes. Es decir, son personas. Comparar con sus hermanos o con otros niños sólo contribuirá a minar su confianza e incluso a desarrollar celos innecesarios.
Dicen que no hay amor más grande que el amor de una madre hacia sus hijos, y es verdad.
Los padres y las madres tienden a prestar atención a los niños cuando estos se portan mal. Sin embargo, nunca lo hacen cuando están tranquilos o atentos a las conductas buenas porque según ellos es lo que deben hacer. ¿Por qué no se identifican estas conductas positivas?
Una alimentación balanceada es clave en la salud de nuestros hijos, sin embargo en otoño e invierno se debe tener mayores precauciones. La ingesta de alimentos ricos en Vitamina A, B y C ayuda a prevenir contagiarse de los virus en el ambiente.
Nuestro departamento médico comparte un artículo donde podremos encontrar una guía alimenticia adecuada para proteger a nuestros hijos de los resfriados.
Podrá parecer extraño el título de este artículo, pero la verdad es innegable, nosotros crecimos en una época totalmente diferente a la época en la que están creciendo nuestros hijos.
Todos los ámbitos de la vida se ven afectados por nuestra autoestima pues ésta es el valor que nos damos a nosotros mismo, el sentido y pertinencia de nuestras habilidades, así como el concepto que tenemos de nuestro cuerpo, el significado que damos a nuestra existencia.
En Silicon Valley proliferan los colegios sin tabletas ni ordenadores y las niñeras con el móvil prohibido por contrato.
